Alguien bien informado y tan solo con un poco de sentido común, podrá concluir que los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador no serán tocados ni con el pétalo de una investigación, por parte de la Secretaría de la Función Pública (SFP). Y es que, resulta muy conveniente para los hijos del presidente que como titular haya quedado Raquel Buenrostro, una funcionaria que ha rayado en la abyección hacia el presidente saliente.
Muchos han concluido, que con el nombramiento Raquel Buenrostro, se está garantizando la protección contra los hijos del presidente, quienes han sido señalados por presuntos casos de corrupción y tráfico de influencias. Al menos, así lo aseguró Carlos Loret de Mola en su columna Historias de reportero apenas el fin de semana pasado.
En esta columna el titular de Latinus, señala que Buenrostro es mencionada en las grabaciones telefónicas de El Clan, la red de tráfico de influencias encabezada por Andy y Bobby López Beltrán, hijos de López Obrador, como una de las funcionarias de alto nivel que facilitan los negocios de la familia presidencial. Así que, si usted es de los que creían que con la llegada de Claudia Sheinbaum, estos pilluelos serian llamados rendir cuentas, sencillamente está usted equivocado.
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