La eliminación de México en la Copa América, tras empatar con Ecuador en el último juego de la fase de grupos, ha dejado a la Selección Nacional en una situación crítica. Una vez más, el técnico en turno, Jaime Lozano, ha sido señalado como el principal responsable. Aunque el director de Selecciones Nacionales, Duilio Davino, ratificó a Lozano en una conferencia de prensa, los altos mandos ya habían iniciado la búsqueda de un reemplazo. Esta búsqueda cesó por un tiempo, pero ahora se ha reactivado.
Medios deportivos han identificado a dos posibles candidatos: André Jardine, técnico de las Águilas del América, y Guillermo Almada, preparador de los Tuzos del Pachuca. Ambos han ganado la Liga MX y demostrado carácter con sus respectivos clubes. El próximo técnico necesitará tiempo y apoyo para intentar rescatar al equipo.
La Federación Mexicana de Futbol (FMF) ha estado sumida en problemas durante mucho tiempo; culpa de sus malos manejos y ambición por el dinero en vez de lo deportivo. Para que México pueda aspirar a ganar una Copa del Mundo, se requiere un plan a largo plazo, de veinte a treinta años, no solo de cuatro. Las expectativas de convertir a los jugadores en estrellas como Messi o Cristiano Ronaldo de la noche a la mañana son irreales. Reconocer las limitaciones actuales sería un primer paso crucial.
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