Fue el Ejército el que tuvo que arreglar el desmadre de las deudas de Amílcar Olán con los transportistas de basalto. Les debían 90 millones de pesos y por ello iban a bloquear diferentes puntos en las carreteras del país. Pero el Ejército intervino para arreglar el desmadrito de los hijos del presidente. Es curioso que después de que se anunciara que el paro de transportistas se suspendía, saliera a la luz información sobre las investigaciones que tiene el Ejercito sobre los contratos de Amílcar Olán.
Señala el portal informativo Latinus en nota de Mario Gutiérrez: «La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) investiga los contratos que entregó al empresario tabasqueño Amílcar Olán, íntimo amigo de Andy y Gonzalo “Bobby” López Beltrán, hijos del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Información entregada por la Sedena vía transparencia, señala que el Órgano Interno de Control (OIC) abrió el expediente administrativo de investigación número 2292/2024/CDAC/SEDENA/DE17 en el que está revisando la actuación de sus servidores públicos y todo lo relacionado con Amílcar Olán, figura clave de ‘El Clan’, la red de tráfico de influencias y negocios encabezada por los hijos del presidente».
Lo paradójico del asunto es que el Ejército, a pesar de que investiga a Amílcar, se negó revelar los datos de los contratos, pues vulnera la confidencialidad y secrecía de la investigación abierta por el OIC, ya que «el interés público de que se conozca la verdad histórica de las probables responsabilidades de los servidores públicos, es superior al de que en este momento se haga público, cuando aún no existe determinación o resolución de la investigación administrativa». Así las cosas.
Comentarios