Pues por todo eso el presidente López Obrador ha lanzado en contra de Latinus, Loret y Brozo a la Unidad de Inteligencia Financiera, como una forma de represión en contra del medio de comunicación y de los periodistas.
Dice Loret de Mola en un mensaje de “X”: «Ya no es solo persecución y acoso contra periodistas. Esto es una bajeza, una cobardía. ¿Qué sigue? ¿Hasta dónde quiere llegar el régimen para intentar callarnos? En vez de investigar sus propios escándalos de corrupción, el gobierno usa de nuevo las instituciones del Estado para vengarse de los periodistas que documentamos esa corrupción. Quiere acabar con Latinus. Quiere acabar con nosotros. En cualquier país respetuoso de las libertades esto sería inadmisible, impensable, escandaloso». López Obrador ya se va, y al parecer no le importa caer tan bajo.