Después de la salida de López Obrador del partido del Sol azteca, éste perdió el rumbo, sus luchas intestinas por los cotos de poder dentro del mismo, generaron que sus diferentes tribus se enfrascaran en un canibalismo malsano que acabo con los ideales de izquierda que identificaban a este partido. Además, el haber abierto las puertas de par en par a sujetos impresentables, mermaron la poca credibilidad que tenían.
Uno de los graves errores que cometieron sus líderes, fue haberse alejado de las bases. En muchas ocasiones dejaron fuera a los fundadores, por privilegiar a personajes siniestros que solo buscaban el aval de un partido para poder accesar a las cúpulas del poder.
Hoy se reparten culpas, el mismo Jesús Zambrano, sale a decir que la candidata opositora jamás los tomo en cuenta. Tal vez ese líder, olvida que el PRD cargaba con un descredito que en lugar de sumar le podía restar simpatías a la candidata hidalguense. Hoy el PRD, yace en el basurero de la historia de este país.
Comentarios