Dice el periodista Raymundo Jiménez sobre una reunión urgente llevada a cabo en Casa Veracruz: «En cuanto trascendió este conciliábulo y se esparció en las redes sociales, del círculo cercano al gobernador comenzaron a investigar sobre el autor de la filtración. En un principio se lo atribuyeron a alguno de los exfuncionarios de la Secretaría de Gobierno que recién fueron separados de sus cargos por órdenes de Nahle y que aún mantienen contactos en la administración. Sin embargo, ayer trascendió que las sospechas habrían recaído en el dirigente estatal de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, quien últimamente andaría muy resentido por el supuesto ninguneo de la candidata a gobernadora».
A Ramírez Zepeta, siendo dirigente estatal de Morena, le ofrecieron ser suplente en una diputación plurinominal donde el titular era Diego Castañeda Aburto, secretario particular de la señora Nahle. Inconforme por ese ninguneo, al parecer Ramírez Zepeta buscó la manera de vengarse; al todo indica que se vengó. Ya lo dice el dicho, «no es indio el que no se venga».