Virginia Duran Campollo / La manera como despide su último año del Día de las Madres López Obrador es con aberrantes actos de misoginia. El desprecio a las mujeres mexicanas- y algunas extranjeras- ha sido una constante de este macho alfa. Se mofa, burla de sus necesidades.
Les crea delitos a las madres buscadoras de sus hijos, quita las vacunas y los desayunos escolares a cientos de miles que se favorecían, desprecia los movimientos feministas y la lista de agravios es larga. Utilizó a las mujeres en su gabinete como floreros sin mayor trascendencia que la que su gana le diera.
Su sucesora es el ejemplo mayor de la manipulación. La nombra corcholata- algo desechable- y le otorga un poder que no tiene. La conduce como quiere y en abierto la inculpa por no alabarlo. Será la mano que mecerá la cuna si llega.
*** Se distingue el país por el aumento de los feminicidios con 10 mujeres asesinadas por genero a diario y sin los victimarios ante la ley.
*** Rodeado en su mayoría de hombres el mesías macuspano no hizo nada por reivindicar a la mujer. Sale sobrando sus festejos al respecto ya que se ha amurallado para no atenderlas. Es misógino. Miedoso ante la inteligencia, preparación, cultura, brillo de mujeres como Carmen Aristegui, Denise Dresser, Amparo Casar, Anabel Hernández y un sin número más de periodistas e intelectuales que le molesta su luz.
*** Dice el filósofo que “por lo mismo que son enanos son soberbios”. *** “La misoginia funciona como un sistema de ideología o creencias que han acompañado a las sociedades patriarcales”.
***Es hipócrita al celebrar a las madres pues estas son amor y es lo que menos tiene quien ignora el sufrimiento de las que han perdido a sus hijos o violentado a sus hijas. Tiene mínima empatía y parece estuvo ausente de cariño y dirección maternal.
*** Y para las agruras…
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