La parte más sensible de una sociedad, son sus niños, quienes, como valiosos capullos, representan el futuro de los estados. Sin embargo, las celebraciones que auspicia el estado, donde los llenan de golosinas y los divierten con payasos, no son suficientes para compensar el descuido y la pobreza en que muchos infantes se encuentran. Según informes oficiales, en México existen aproximadamente 19.5 millones de infantes en situación de pobreza, lo que vendría representando cerca de un tercio de la población total.
Si somos honestos, debemos de reconocer, que los esfuerzos del gobierno federal no han sido suficientes para dar mejores condiciones de vida a los niños de México. De acuerdo con los datos del INEGI, en México mueren cada año aproximadamente 8,500 personas a causa de la desnutrición, de ellos, un promedio de 850, tenían menos de 5 años de edad.
De marea que, si el estado mexicano quiere festejar a sus niños, que mejor hacerlo, creando políticas que protejan, no solo su salud, sino también, su dignidad e integridad como la parte más sensible de la sociedad mexicana.
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