El primer damnificado del debate jarocho que se llevó a cabo en las instalaciones del bello Museo de Antropología de Xalapa, no fue ni la candidata morenista ni el candidato de la alianza opositora, el primero que salió bien raspado, fue el gobernador de Veracruz, quien ha sido considerado por muchos veracruzanos, como el peor gobernante que ha tenido este terruño. De entrada, tendrá que entregar cuentas y explicar si son ciertas las acusaciones que hizo en su contra, Pepe Yunes, quien señaló que Veracruz se vio limitado de obras y de infraestructura carretera, debido al subejercicio de recursos.
Si esa acusación fuera cierta, y todo apunta a que así es, el actual ejecutivo local debería estar contratando a un buen abogado para que pueda librar la cárcel, sobre todo si el abanderado de Fuerza y Corazón por Veracruz, se levanta con la victoria.
Y es que, por donde se le busque, no hay forma de ayudar a Cuitláhuac García, si usted echa un vistazo al rubro de salud, ahí salen debiendo, en educación, solo simularon equipar escuelas, en infraestructura carretera, hasta, Claudia Sheinbaum, fue testigo de la pésima condición en que se encuentran las carreteras veracruzanas, al grado de prometer componerlas y echarles una mano, si es que llega a la presidencia. Por lo pronto, el más descalabrado del primer debate, fue el infame gobernante jarocho.
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