En medio de escenas de miedo, el tiburón aferraba la pierna del joven mientras su padre intentaba desesperadamente liberarlo. Michael Nes, padre del menor, relató cómo su hijo le imploraba que lo ayudara a sacar su pierna de las fauces del pez, lo que lo llevó a forcejear con el escualo para liberarlo. Finalmente, tras una intensa lucha, soltaron al tiburón de nuevo al mar y los paramédicos llegaron en su auxilio, atendiendo al joven herido.
Sin embargo, lo sorprendente llegó en la ambulancia, cuando el adolescente preguntó a su padre si podrían regresar al día siguiente para pescar nuevamente, dejando perplejo al hombre. «¿Podemos volver a pescar mañana?«, preguntó el joven, mientras su padre respondía incrédulo: «¡No tengo ni idea!«. Hasta el momento, se reporta estable la condición del joven tras este desafortunado incidente.