A pesar de que sus familiares y amigos acudieron a las autoridades la Fiscalía de Michoacán no daba ninguna muestra de que se abriría una carpeta de investigación. Los días pasaron y fue hasta el 10 de abril que la Fiscalía indicó que investigarían la muerte de Meredith. En el reporte señalaron que el caso será investigado por violación al derecho y a la dignidad humana. Sin embargo, hasta el momento no hay ningún avance que determine quienes fueron los responsables. La situación generó indignación entre los habitantes del municipio de Tarímbaro, pues las autoridades minorizan la situación como si Meredith no fuera un ser humano que merece que le hagan justicia.
Debido a la falta de compromiso de parte de la Fiscalía se han sumado grupos de la comunidad LGBTQ+ para que se hagan valer los derechos de Meredith Escarlet. Los integrantes de la comunidad LGBTQ+ señalan que su muerte es un claro ejemplo de un crimen de odio.