Hay que ser muy, pero muy estulto como para acusar, de manera maledicente, a Pepe Yunes de ser el dueño de ese rancho, tratando de hacer creer que la propiedad es mal habida, como si la hubiera comprado en un plazo de dos o tres años, con dinero ilegal. Dice el “caza chichifos” Ramírez Zepeta: «José Francisco Yunes Zorrilla, tiene un rancho en el municipio de Perote que no lo tiene ni Obama. Con aserraderos en los que caben prácticamente todos los árboles talados del Cofre de Perote y en el que hay manadas de caballos pura sangre. Un rancho que es el vivo ejemplo de la corrupción en la que ha vivido este exfuncionario priista».
¡Pobre diablo! El líder de un partido, Morena, que no se ha atrevido a contestar las acusaciones que hemos hecho sobre los autos que les compra a sus amantes, sobre los cargos en los que los ha colocado, de los dineros que se gasta en las francachelas realizadas en el Poza Rica Inn.