La incapacidad para gestionar estos sentimientos de manera saludable desencadenó una violenta reacción que terminó en un feminicidio, dejando un profundo dolor y un vacío irreparable en la familia y amigos de la víctima.
El impacto de este suceso se ha extendido más allá de las calles de la colonia Álvaro Obregón. En las redes sociales, donde la noticia se difundió rápidamente, se ha levantado una ola de indignación y exigencia de justicia. Se clama por un castigo ejemplar para el agresor, quien debe enfrentar las consecuencias de sus actos como adulto, según demandan muchos usuarios en línea.