Hubo personas que relataron que lo habían visto eyacular encima de la levadura del pan. La cantidad de comentarios y anécdotas hizo que las autoridades de Morelia intervinieran en el caso, determinando que lo mejor sería que la panadería quedara clausurada. En un comunicado por parte de las autoridades indicaron que después de inspeccionar el lugar encontraron ciertas irregularidades de sanidad.
Como, por ejemplo, las piezas de pan estaban expuestas a un contenedor de basura instalado junto a las vitrinas. Además de que el horno tenía la posibilidad de explotar debido al deterioro y a que el tanque de gas estaba muy cerca del fuego. Hasta el momento el panadero no ha dado su declaración o al menos las autoridades no lo han querido hacer público. Mientras tanto el lugar quedó clausurado con una etiqueta de Sanción Social.