El 18 de febrero habitantes de la unidad habitacional Dos Leones, ubicada en la alcaldía Azcapotzalco en la Ciudad de México reportaron a la policía dos bolsas de basura que dejaron en un basurero de la unidad. En el reporte indicaron que las bolsas tenían manchas de sangre por lo que la policía acudió al sitio. Al indagar descubrieron que en el interior estaba el cuerpo de un hombre de aproximadamente 25 años. El cadáver fue decapitado y mutilado. El domingo 18 de febrero lo único que se sabía respecto al caso es que la víctima era un hombre y tenía varios tatuajes.
La policía indicó que los tatuajes serían de gran ayuda para que los familiares de la víctima lo identificaran. Cuando difundieron las imágenes de los tatuajes, entre los que destacan un diablo, un panteón, un guasón y un texto en donde se incluía la leyenda «no permitas que mi muerte sea violenta», la policía recibió una llamada. En la llamada los familiares de la víctima dijeron haber reconocido los tatuajes.
El 19 de febrero la Fiscalía General de Justicia de la CDMX reveló la identidad del hombre. El sujeto que fue identificado como Jesús Ricardo tenía un reporte de desaparecido desde el pasado 15 de febrero. Los familiares de Jesús dijeron que la última vez que supieron de él estaba en el Estado de México. Entre los comentarios que desató la noticia hubo una persona que escribió «Seguramente era un niño bien, estudioso, que no se metía con nadie, no tenía vicios».
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