Ya entrevistó a Nico, quien fuera chofer de López Obrador, y este, quien tiene una colección de autos de lujo, le dijo que es mentira que él haya recibido dinero del narco. Ciro también entrevistó a Mauricio Soto Caballero, acusado de reunirse con los narcos, uno de los hombres más cercanos de López Obrador.
Por supuesto Caballero negó las acusaciones, se puso como víctima, como una blanca palomita y Ciro se lo certificó. No es la primera vez que Ciro actúa de esa manera. En su momento se fue en contra de Carmen Aristegui y el reportaje sobre la trata de bancas en el PRI de la Ciudad de México, encabezada por su amigo Cuauhtémoc Velázquez de la Torre. Ciro en su momento defendió a Javier Duarte y a otros que tenían la causa perdida.