En el pueblo de Tarosiverskaya, en la región de Óblast de Leningrado, Rusia, la policía detuvo a una mujer identificada como Svetlana, luego de que encontraran el cuerpo de su esposo Vladimir en un cuarto de la vivienda que ocupaba como un lugar donde realizaba ritos satánicos. En la información señalan que trabajadores sociales llegaron a la vivienda para inspeccionar el entorno de vida de los niños que residían en el domicilio. Cuando ingresaron a la vivienda se percataron que había un cuarto que Svetlana mantenía bajo llave. Al indagar descubrieron que había un cuerpo momificado en una cama. Tras las investigaciones descubrieron que el esposo de Svetlana había desaparecido desde el año 2020.
Cada vez que le cuestionaban sobre el paradero de su esposo la mujer decía que había salido de viaje. En las interrogaciones los hijos de Svetlana confesaron que un día su padre resbaló de su casa y perdió la vida. Relataron que su madre les dijo que no dijeran nada y para asegurarse de que no le contarían a la familia de Vladimir los amenazó con internarlos en un centro psiquiátrico.
El accidente que tuvo el padre de los menores ocurrió en el año 2020 y desde ese momento el cuerpo lo mantuvo en una habitación en donde lo embalsamó y momificó para mantenerlo en la recamara. En este momento la policía indaga si la muerte de Vladimir fue un accidente o si Svetlana lo asesinó. Después de que la descubrieron la mujer confesó que con el cuerpo rendía ritos a Anubis, dios egipcio guardián de las tumbas, asociado con la muerte. La mujer relató que le rendía rituales a Anubis para que el cuerpo de su esposo no se corrompiera.
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