En 2022 reportaba el periódico El País: «Gabriel Quadri deberá pagar por su transfobia. El Tribunal Electoral ha determinado que sus reiterados ataques contra la comunidad transgénero, a quienes ha calificado como “trans-fascistas” y “hombres vestidos de mujer”, constituyen mensajes de odio que deben ser sancionados. La corte ordenó al Instituto Nacional Electoral (INE) inscribir al diputado panista en el padrón de agresores políticos contra las mujeres en razón de género durante cuatro años, por lo que no podrá formar parte de las boletas electorales en ese tiempo. La decisión de los magistrados responde a una denuncia presentada en marzo por la diputada trans Salma Luévano, de Morena».
Gabriel Quadri, para evitar la sanción del INE se disculpó con la diputada Salma Luevano. Pero ella no aceptó la disculpa. Emperrada, la diputada trans se fue hasta las últimas consecuencias. Sin embargo, después de que el presidente López Obrador la llamara “señor vestido de mujer”, la diputada trans lo disculpó, antes de que López Obrador se disculpara.
Una vez que el presidente reconoció su error, la diputada trans no se fue hasta las últimas consecuencias, sino que, sumisa, amaestrada, sólo movió la colita y aceptó la caricia en la testa que le hizo el presidente.
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