Hoy, el propio presidente de la república ha impedido con su discurso de odio y rencor la participación ciudadana. En sexenios anteriores, todos los presidentes contribuyeron a la unidad ante la tragedia, los líderes partidistas hicieron su parte, sumándose a los esfuerzos del gobierno federal.
Lo peor de todo, es que el presidente López Obrador, olvida que a participación de la sociedad civil ha sido clave para la recuperación ante la tragedia. Olvida que ante la tragedia se debe privilegiar a los damnificados y dejar para después, las descalificaciones y rencores. Además, no debe de olvidar que los damnificados tendrán voz y voto en el 2024.