En los relatos indicaron que sus compañeros no contaban con el armamento adecuado para enfrentar a los sicarios, señalan que las armas que les dan están viejas y en malas condiciones. Ante la artillería de los agresores los oficiales de Coyuca no pudieron hacer nada. Asimismo, relatan que los compañeros fallecidos no contaban con un seguro de vida, la corporación no cubre gastos médicos ni gastos funerarios por lo que las viudas e hijos quedarán desamparados.
Ante la situación el presidente Andrés Manuel López Obrador mandó sus condolencias a los familiares de las víctimas y confirmó el en vio de 300 elementos de la Guardia Nacional al municipio de Coyuca de Benítez en manera de refuerzo. Sin embargo, los familiares de las víctimas exigen que el gobierno los apoye, pues los oficiales fallecidos eran el sustento de sus familias.