Sobre esas bendiciones el papa argumentó: «La defensa de la verdad objetiva no es la única expresión de esa caridad, que también está hecha de amabilidad, de paciencia, de comprensión, de ternura, de aliento. Por consiguiente, no podemos constituirnos en jueces que solo niegan, rechazan, excluyen». El papa Francisco además dijo: «La prudencia pastoral debe discernir adecuadamente si hay formas de bendición, solicitadas por una o por varias personas, que no transmitan una concepción equivocada del matrimonio».
Fue entonces que definió lo que debería ser la bendición para un clérigo católico. El papa dijo que con la bendición «se está expresando un pedido de auxilio a Dios». Y esos pedidos de auxilio a Dios no se le pueden negar a nadie. Ante este cambio de postura, ¿cuál es su opinión?