Lo extraño del caso es que la dama lo hizo teniéndolo afuera de un cuerpo acuoso, ósea, lo jalaba muerto por la calle. Tal vez la chica tenga algún retraso mental porque no es posible que alguien cuerdo elabore una situación así.
Era de esperarse que a la protagonista le dieran con todo. «De veras que ya no se sabe ni cómo andan las cosas y las personas», «Supongo que era el velorio del pez.», «Tal vez el pez quería ser perro y ella solo le dio gusto o ella quería tener un pez perro, ¡no lo sé!», «Con la pura facha se nota que está demente», se lee entre las reacciones. Las generaciones vienen cada vez peor.
