Por supuesto, están arrepentidos ahora que se encuentran en la cárcel, pero si la justicia no los hubiera alcanzado, estarían muy complacidos por su demostración de poder. En Puebla, y después de 7 horas de audiencia, un juez determinó prisión preventiva a para estos dos jóvenes, acusados de lesiones dolosas y discriminación; los gemelos ya están ingresados en el penal de San Miguel en Puebla.
Vale mencionar que las consecuencias de esa golpiza fueron una fractura craneal y lesiones en uno de los ojos de Calderón. Los padres de los imputados salieron de la audiencia sin sus hijos y decidieron no dar comentarios a la prensa. Por cierto, ¿dónde están los otros 5 que formaron parte de la horda que golpeó a Ernesto Calderón?