Hace poco, se acaba de dar a conocer que el llamado de estos atletas no fue por mandato de Lozano, de hecho, él ni los quería, pero la disposición de mandarlos a llamar viene de los altos directivos de la Federación Mexicana de Futbol, quienes desde muy temprano metieron mano negra en el nuevo proyecto del balompié azteca.
Asimismo, la naturalización del colombiano, Julián Quiñones, fue orden de los de “pantalón largo”, ya que el plan original era convertir en nacional a más futbolistas extranjeros y así arribar al mundial de 2026, el cual se celebrara en nuestro país. Con estos modos nunca vamos a llegar a nada.