Ya vino una supuesta ministra de Costa de Marfil y no se lo llevó. Se rumora, dijo el gobernador de Cuitláhuac García, que el Bola 8 dejaría la Secretaría de Gobierno, y en lugar de zanjar de tajo el rumor, el gobernador dejó que siguiera vivo: «No podemos hablar, ni sí, ni no, ni qué tan cierto, nada que se pueda interpretar apoyo o desavenencia contra lo que sea, ahorita, les comento: quietos todos».
Dicen que Cisneros Burgos se podría ir a un puesto en una dependencia federal. Por favor, en la que sea, el caso es que se vaya a Veracruz. Si lo quieren encumbrar o si lo quieren esconder, háganlo, el caso es que le bajen a la palanca del excusado para que todo su contenido se vaya por el caño.