Es por ello que en los conciertos donde se presentan los abuchean, los corren y hasta los cancelan. Por ello les urge el drama, les urge en perdón, les urge que los entrevisten para decir que son muy mexicanos, aunque en la primera entrevista presumieron que les gusta más la comida de Washington que la de México.
De hecho, la entrevista con el empresario musical Pepe Garza fue en la casa que el grupo le compró a sus padres, y los invitados fueron recibidos con un banquete de platillos mexicanos, como arroz, frijoles, tortillas hechas a mano, chile de molcajete, carne asada y guacamole. Y es que los hermanos aseguraron que siempre han comido comida mexicana y que les gusta mucho. Llorando Yahritza declaró: «Crecimos comiendo comida mexicana porque éramos bien pobres». Pero nadie les cree.