Los vecinos identificaron al responsable y de manera extraoficial contaron que días antes del crimen habían escuchado decir al asesino que estaba cansado de que los niños hicieran tanto ruido en las avenidas del vecindario: «Antes de que le disparara, había dicho algo acerca de que eran demasiado ruidosos», narró una de las vecinas del agresor.
La policía detuvo al culpable y será juzgado por un tribunal de justicia por el delito de homicidio calificado en contra de una menor de 8 años de edad. Desde el momento en que ocurrió el suceso los menores de edad son supervisados por sus padres mientras juegan en los alrededores.