En los comentarios la gente a ratos fue despectiva para referirse a esta pareja, pero hubo otros que los apoyaron en su decisión de salir del closet, pues incluso en estos tiempos, donde la homofobia se trata de erradicar, aún hay quienes que condenan estos actos de amor como un pecado.
Se dice que estos compadres antes de unir su vida en matrimonio tenían parejas, pero al entender que estaban enamorados las dejaron. Ellos, así como otros novios, se fueron al Registro Civil en lo que fue el primer matrimonio igualitario en Vicente Guerrero, Durango. ¡Vivan los novios!