Está más que claro que los 6 aspirantes a la presidencia, las llamadas “corcholatas”, están en plena campaña, el Instituto Nacional Electoral dijo que no, que no hay actos partidistas. Una de las consejeras del INE, Claudia Zavala señaló enfática: «Es clarísimo que no son actos partidistas sino proselitistas. Se deben parar esos eventos porque efectivamente las reglas que están en la ley, que son las que reiteramos en la medida cautelar, parece que no se están cumpliendo». Tiene razón Claudia Zavala.
Porque en su afán proselitista, las “corcholatas” prometen y prometen cosas en caso de llegar a ser el candidato elegido por Morena. Pero a pesar de toda la evidencia, avaló las campañas simuladas de las “corcholatas”.
El representante de Morena ante el Consejo General del INE reclamó: «La Comisión de Quejas y denuncias del INE pretende limitar derechos humanos dentro de la instrumentación del proceso para la definición de la Coordinación para la Defensa de la Transformación». Este es el INE que López Obrador siempre soñó, un INE que se adaptara a sus caprichos y trampas. Un INE omiso ante las violaciones de sus queridas “corcholatas”.
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