Funcionarios de la Fiscalía General de la República recibieron un lote de joyas incautado al empresario Apel Çelik, acusado de contrabando. Cuando Érika Paola Avilés Demeneghi, Guadalupe Demeneghi Morales y Julián José Betancourt Turriza pidieron las joyas para comparar las facturas que tenían de ellas, las joyas ya habían desaparecido. Después de años de juicio, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) analizó el caso y ordenó destituir y consignar ante un juez federal a dos funcionarios de la Fiscalía General de la República (FGR). Los consignados son Víctor Manuel Munguía Baltazar, fiscal adscrito a la Unidad Especializada en Análisis Financiero y Celia Almaguer Hernández, directora general adjunta encargada de despacho de la Oficina del Titular de dicha Unidad.
Señala la SCJN en su comunicado: «Se constató que pese a todos los requerimientos que se les hicieron, las referidas autoridades fueron omisas en dar cumplimiento a la sentencia de amparo en la que se les ordenó, entre otros aspectos, llevar a cabo el desahogo de diversas diligencias probatorias, a través de las cuales la quejosa buscaba acreditar la propiedad y obtener la devolución de joyería que en su momento le fue asegurada, con un valor de más de 200 millones de pesos. Además, las autoridades responsables no informaron al juez de amparo sobre la entrega material de los bienes al Servicio de Administración y Enajenación de Bienes».
En uno de los encabezados del comunicado se precisa: «La Constitución Federal faculta a la Corte para separar de su encargo y consignar a los funcionarios que incumplan una sentencia de amparo». Así que cuidado con todos esos magistrados, diputados y funcionarios públicos que no estén acatando las sentencias de amparo. Pueden terminar en la cárcel.
Comentarios