Del día 1 a los 5 años, en la primera etapa, el niño debe ser tratado como Dios en cuanto a que lo fundamental es lograr que se sientan queridos e importantes. De los 5 a los 15 años, en la segunda etapa, el papel que se le otorga es todo lo contrario: ahora debe ser tratado con rigor, el menor deberá ser obediente. En esta etapa adquiere más relevancia la escuela, orientada a inculcar a los alumnos el valor del trabajo en equipo. De los 15 en adelante, en la tercera etapa, el adolescente debe ser tratado como igual.
Aprende que todo acto tiene una consecuencia. Obtiene un papel en la sociedad del que debe hacerse responsable. Así que si le preocupa la educación de su hijo lea e infórmese sobre cómo darle una buena crianza al pequeño. Vale señalar que en el método de enseñanza Ikuji predomina el vínculo entre la madre y el hijo, pues desde el primer año hasta los 3 la madre es la que más convive con el niño.