Edgar Hernández* / En Veracruz se destapa la cloaca de la corrupción.
Legisladores locales y federales, partidos políticos opositores, la Auditoría Superior de la Federación y el aspirante gubernamental Pepe Yunes -en respuesta al reclamo ciudadano-, demandan a Cuitláhuac García explique el sospechoso destino y fin de las cuentas públicas que al 2022 alcanzan los 12 mil 497 millones de pesos.
A casi cinco años de distancia y con el descrédito de estar entre los tres peores gobernadores del país, Cuitláhuac, artífice de ataúdes, entierra a Veracruz al negarse a dar cuenta del destino del dinero público vía subejercicios, desvíos y cuentas turbias.
La opinión pública, sumada al reclamo opositor, le ha venido exigiendo al mandatario rinda cuentas de los 9 mil 726 millones de correspondientes a los periodos 2019 al 2021, así como las devoluciones vía subejercicios.
En realidad, se teme que el monto total de las observaciones por posible daño patrimonial de 2019 al 2022, sea por 12 mil 479 millones 520.90 pesos, según documentación oficial de la ASF presentada por el PRI estatal.
El aspirante gubernamental, el diputado federal Pepe Yunes, llamó a la Auditoría Superior de la Federación y al ORFIS a aclarar “si en realidad se está depositando el total de recursos a Veracruz o solo es una concertación entre el estado y la Federación”.
Ello, destacó, debido a que es “ilegal la simulación de envíos de recursos; el gobierno estatal no debe firmar y después regresar el dinero como subejercicio”.
Mientras, el Partido Acción Nacional en la entidad exigió al gobierno de cuenta sobre la presunta simulación que se ejerce de un dinero que no arroja “resultados concretos”.
Y es que, “De acuerdo al informe de las finanzas públicas 2022, inexplicablemente fueron devueltos a la Federación tres mil 681 millones de pesos por subejercicios”, sostienen los azules.
El tema de los números -sin considerar las fortunas inexplicables de la familia de Cuitláhuac y colaboradores- estriba en jugar a que la Federación envía el recurso financiero, pero no de forma real, sino por simple papeleo.
Es por ello que la deuda pública se suma al caos financiero del gobierno.
Para Movimiento Ciudadano, dicha deuda sufrió un desmesurado incremento no pagable antes del 2040 al rebasar los 48 mil millones de pesos.
Su dirigente, Sergio Gil Rullán, explicó además el equívoco del gobernador quien sostuvo la deuda pública había bajado 11 mil millones de pesos.
“Pero, perdón, en sus propias gráficas no hay ninguna disminución de éstos, además -dijo- que se pagaron 6 mil millones de pesos de estas obligaciones que él dice deuda y lo hicieron sacando un crédito, entonces, pagaron un dinero que no tenía intereses”.
Gil Rullán ha retado a Cuitláhuac a que debatan “a que dé la cara”, sin encontrar respuestas.
Es por ello que Movimiento Ciudadano en breve, dará cuenta al detalle de este problema financiero que, al paso que va, tendrá a Veracruz endeudado los siguientes 40 años.
Y es que, para la opinión pública resulta inexplicable que la entidad con casi 130 mil millones de presupuesto anual esté atorada con deudas impagables y que encima de todo que no haya dinero ya que todo se regresa a la federación.
Hoy Cuitláhuac tiene un problema, no de pesos y centavos, sino de miles de millones por aclarar… y el tiempo se le acaba.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo
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