Y decimos que no pierde el tiempo ya que curiosamente este funcionario mal hablado resulto muy previsor de su futuro. Resulta que, en su primera declaración patrimonial, en 2019, declaró ingresos por 58 mil pesos, sin embargo, en 2023 por dos millones 87 mil pesos de salario y ocho millones 121mil pesos en asesorías que no detalla.
¡Ojo!, ahí hay gato encerrado y las autoridades hacendarias, como la Auditoria Superior de la Federación tiene el compromiso de investigar que esta pasado con este personaje.