Uno de ellos estaba armado con un fusil con el que amenazó a los clientes. Testigos de los hechos relataron que a los maleantes no les importó que entre los clientes hubiera niños y señoras adultas, pues a todos los tenían encañonados mientras que uno de ellos sacaba todo el dinero de la caja registradora.
Después de que el asalto terminara los delincuentes se subieron a una motocicleta y antes de que se dieran a la fuga el dueño de la tienda los alcanzó en su vehículo. Tras derribarlos los hombres continuaron escapando a pie. Respecto al caso, la policía indicó que están investigando para dar con los responsables, sin embargo, los residentes señalan que en realidad las autoridades no hacen nada para mantenerlos seguros.