Virginia Duran Campollo / Los migrantes son el drama más doloroso que una sociedad puede experimentar. Las buenas conciencias se cimbran al observar tanto sufrimiento de familias “aspiracioncitas” que emigran para buscar una mejor vida y son presas de tormentos inimaginables.
Como en el reino animal a salto de mata luchando por sobrevivir. Una lección de humanismo la solidaridad que andan en ese sinuoso y largo camino. Combatiendo contra viento y marea, los guerreros no se amilanan ante la prepotencia de autoridades americanas y mexicanas. Sufren de todo, pero tienen una resistencia indómita.
Están las escenas y reseñas. Venezolanos, cubanos, nicaragüenses y mexicanos como hipnotizados marchan con una sola mira: lograr mejor trato y vida en otro país que los suyos no tienen. *** Sería menester que los funcionarios nacionales en vez de peroratas y politiquería concordaran con los presidentes de esos países hermanos y los conminaran a solucionar los problemas que abaten a sus ciudadanos y que los hacen huir de forma temeraria.
México también exporta y podemos vernos en ese espejo. Del nunca jamás pasara, pero si pasa. Vivimos en un Estado fallido, aunque lo nieguen y nos quieran engañar. Todo por las nubes empezado por la canasta básica. *** El porro servil y lacayuno dizque gobernador de Veracruz en vez de andar de revoltoso podría ponerse a trabajar.
De la nada ahora es un hombre rico. De comer “jochos” en el parque Juárez a los ostentosos banquetes hay un abismo. Como no labora solo está pensando en sandeces como organizar –con costo al erario- mítines para ir a ofender a una mujer de la tercera edad.
Se entiende que no respete a las mujeres por obvias razones, pero que atente contra un poder autónomo como es el Judicial solo un ignorante se atreve. El Cui. *** Y para las agruras del mole…usted sabrá qué tomar.
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