Qué tiene en común Ignacio Ovalle, exmandón de Segalmex, y Francisco Garduño, aún madamás del Instituto Nacional de Migración (INM). Pues no hay que quebrarse mucho la cabeza, los dos son funcionarios de la 4T, esta dupla disfruta de contar con la amistad y la venia del presidente López Obrador. El primero está a punto de pisar chirona por un monumental desfalco que ya rebasa los 15 mil 300 millones de pesos. Sin embargo, el funcionario ni suda ni se acongoja, ya que disfruta del manto protector del Ejecutivo federal.
Prueba de ello, es que el mismo presidente salió a decir en una de sus conferencias “mañaneras”, que al extitular de Segalmex lo habían chamaqueado. En el caso de Francisco Garduño, aún mandamás del Instituto Nacional de Migración, el presidente también le ha tenido consideración, a pesar de que también está a punto de caer en el fresco bote.
Al igual que lo hizo con Ignacio Ovalle, el Ejecutivo federal señaló que éste había hecho buen trabajo en el del Instituto Nacional de Migración. Lo cierto es que las evidencias son muy notorias, y los dos podrían pisar la cárcel en unos cuantos días. ¡Ah! Pero eso sí, el presidente sigue diciendo que los anteriores eran peores.
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