En la conferencia mañanera le salió nuevamente lo cínico: «No es un dirigente, es un grupo de gentes dispuestas a hacer valer sus derechos, no es un grupo de acarreados como los que lleva el bloque conservador, que les preguntan por qué viniste y dicen que ‘el INE no se toca’ o que ‘llegaron unos camiones y nos trajeron’ o que hay un mitin y todo mundo está platicando, comiendo paleta, sin conciencia, o se van porque le cae mal cómo habla el Presidente porque no habla de corrido, acá es distinto».
Los dichos del presidente dejan claro que sus concentraciones o marchas son una respuesta a las marchas ciudadanas, pues a él lo que le importa es demostrar que la tiene (la marcha) más grande.