Al principio la canción de Shakira, en la que reprocha a su exmarido Piqué el engaño que padeció, no sólo parecía una redituable idea, sino además un momento divertido para la música. Sin embrago, después de otra y otra y otra canción dedicada al mismo tema, la colombiana ha dejado evidencia de cuánto le arde que la hayan cambiado por una mujer más joven.
Ella cree que el ardor estimula su creatividad, sacando temas mediocres que con el tiempo pasarán al olvido; pero eso sí, bien que factura y factura, tanto que su defraudación al fisco en España ha dejado de ser problema para ella. Entrevistada por Enrique Acevedo, Shakira volvió a lo mismo. «Hay un lugar reservado en el infierno para aquellas mujeres que no apoyan a otras», dijo la cantante colombiana que cree que todo debe girar en torno a ella.
Creer que todas las mujeres se deben apoyar sólo por ser mujeres, no sólo es ingenuo, sino además sexista. Habría que preguntarle a Shakira si en ese infierno que prefigura hay también un lugar para las ardidas. Seguro ella tendría un palco especial en ese “teatro”.
Comentarios