Las palabras pronunciadas por el presidente a principios del mes de enero no tienen desperdicio alguno. Este dijo: “Ayudando a los pobres va uno a la segura porque ya saben que cuando se necesite defender, en este caso la transformación, se cuenta con el apoyo de ellos. No así con sectores de clase media, ni con los de arriba, ni con los medios, ni con la intelectualidad, entonces no es un asunto personal, es un asunto de estrategia política”.
Con esas palabras, el presidente da a entender que al gobierno de la 4T, le conviene lidiar y darle paliativos a los pobres, no conviene que dejen la pobreza, porque entonces se convirtieran en clase media, y entonces, el presidente y su partido perdería sus bases de apoyo. Ahora entendemos porque no hay generación de empleos, pero si hay incremento económico en las becas y pensiones de millones de mexicanos.