Las imágenes tomadas en la zona muestran numerosos edificios colapsados, incluidos algunos de más de ocho plantas.
El movimiento se ha sentido con fuerza en 14 países, entre los que están Líbano, Siria, Israel, Chipre y Jordania. Ante esta situación, el ministro del Interior, Suleyman Soylu, ha anunciado que se ha declarado el nivel más alto de alarma y se ha emitido una petición de ayuda internacional.