Para la famosa rifa del Avión Presidencial el presidente Andrés Manuel López Obrador mostró como garantía un cheque por 2 mil millones de pesos que supuestamente la Fiscalía General de la República le entregaba para cubrir los premios de la rifa.
Entrevistado por la revista Proceso, Jaime Cárdenas, quien fuera director del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, reveló que ese cheque que la FGR entregó al presidente era en realidad un chuque sin fondos, pues ese cheque no se podía utilizar para la rifa, ya que no era dinero incautado, era dinero que unos empresarios devolvieron gracias a «un acuerdo de indemnización por terminar un contrato de manera anticipada entre el Infonavit y empresarios inmobiliarios»; ese dinero no se podía utilizar para la rifa del Avión Presidencial.
Fue por ello que el presidente le pidió a Jaime Cárdenas que consiguiera ese dinero «de donde fuera», una frase que sólo podría salir del “Rey del Cash”, a quien le conseguían dinero de donde fuera. Fue por ello que Jaime Cárdenas renunció al INDEP, porque no iba a cometer un acto ilegal, aunque el presidente de México se lo estuviera solicitando.
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