Armando Ortiz / La denuncia por desaparición forzada va a perseguir a los policías que detuvieron ilegalmente al tesorero de Sayula toda la vida. Y va a ocurrir que tarde o temprano, cuando ya no cuenten con la protección del gobierno actual, esos policías serán llamados a cuentas por “puercos”. De acuerdo con información periodística “en la denuncia se señala a los oficiales Luis Ángel León Ronzón, Margarito Zárate Aguilar y Víctor Melgarejo Hernández, elementos de la Fuerza Civil que manejaban la patrulla en la que cerraron el paso al coche KIA Río en el que se desplazaba el tesorero y su escolta, el pasado seis de diciembre, y que con lujo de violencia los bajaron y se los llevaron con rumbo desconocido, tapados de la cabeza y esposados. Durante varias horas, relata la denuncia, fueron llevados desde Acayucan, en donde se realizó la detención frente a Villa Cantares, a Coatzacoalcos, en donde los llevaron a instalaciones de la base policial en Palma Sola, en la colonia Benito Juárez Norte”. Han salido a la luz videos en los que se puede advertir como la patrulla de la Fuerza Civil le cierra el paso al auto en el que viajaba el tesorero, en la zona de Acayucan, frente a Villa Cantares; una prueba irrefutable que echa abajo la versión de los policías sobre la detención del tesorero y su escolta. Si bien, ahorita se pueden sentir tranquilos porque este gobierno corrupto está de su lado, tarde o temprano la guadaña segará la cabeza de estos implicados. Y todo por seguirle el juego al secretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, quien a su vez está siendo movido por los intereses de la alcaldesa de Sayula de Alemán, Lorena Sánchez Vargas. Acuérdense señores policías, un día, cuando el Bola 8 se sienta acorralado, entregará su cabeza en bandeja de plata. Al tiempo.
Pinches vividores los del Partido Verde, ahora dicen que ellos no pidieron “vida eterna”; “No requerimos de ayuda artificial”
Los del Partido Verde, unos vividores profesionales del erario, se pegan como rémoras a los partidos en el poder. Lo hicieron con Vicente Fox, lo hicieron con Felipe Calderón, lo hicieron con Peña Nieto y ahora lo hacen, de la manera más abyecta, con López Obrador. Esta vez, aprovechando la enfermiza animadversión que el presidente siente contra el Instituto Nacional Electoral, los del Verde, en la inercia de los cambios, pretendieron incluir una cláusula llamada de “vida eterna”, para que en casos de coalición pudieran compartir votos con los partidos grandes para no perder su registro. Pero hasta López Obrador se opone a esa cláusula de “vida eterna”, por lo que los del Verde, de manera vergonzosa, tuvieron que recular. “Nos dicen que pedimos una cláusula de vida eterna, mienten, mienten, mienten. Desde que nació el Partido Verde, no hemos perdido el registro, no necesitamos ninguna cláusula de vida eterna, no era para eso, no era transferencia de votos, de lo que hablábamos era reconocer las candidaturas comunes, pero antes que nos digan que queremos vida eterna, la vamos a retirar”, declaro Carlos Puente, coordinador del PVEM en la Cámara de Diputados. Pero claro que los del Partido Verde pretendieron incluir esa cláusula y estuvieron cabildeando con el secretario de Gobernación, quien para obtener sus votos aceptó esa aberrante cláusula. ¡Pinches vividores!
López Obrador, “detrás de un fanfarrón se esconde un gran cobarde y un miedoso e inseguro”. Así lo describe Salvador García Soto
Dura la crítica del columnista de El Universal, Salvador García Soto, quien compara al presidente de México como uno de esos agresores de mujeres y feminicidas, que ante el despecho de no poder hacer suya a la dama, la agreden con ácido en el rostro para dejarla irreconocible. Anota García Soto sobre López Obrador: “Como no pudo matar al INE ni desaparecerlo con su fracasada y rechazada reforma a la Constitución, ahora lo que hace es tratar de desfigurarlo y dejarlo dañado y afectado con sus reformas secundarias”. El periodista aduce que no sólo es el rencor y el odio enfermizo lo que mueve al presidente en su intento por desaparecer al INE. También está el temor, pues señala que existe la posibilidad de que en 2024 el partido en el poder no gane las elecciones: “Ese miedo inconfesable de un mandatario que, en el discurso se dice aclamado por el pueblo, todo poderoso y con un partido político que se ha vuelto una maquinaria de Estado, pero en los hechos actúa como un presidente inseguro y temeroso de que Morena y su 4T no puedan ganar las elecciones de 2024 ni mantenerse en el poder”. Para García Soto, detrás de este fanfarrón que es el presidente, “se esconde un gran cobarde y un miedoso e inseguro y así se está comportando el presidente con sus adefesios de reforma electoral impuesta y sin consenso de todas las fuerzas que participan en el juego democrático”.
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