Si alguien lo duda, ahí está el caso del exgobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, al excandidato presidencial del PAN, Ricardo Anaya, y más recientemente al dirigente tricolor Alejandro Alito Moreno.
Eso sin contar el descaro de Cuitláhuac García, al usar a la titular de la fiscalía jarocha, Verónica Hernández Giadáns, para meter a la cárcel de manera injusta a del Río Virgen, a la extitular del IVAI y al perredista Rogelio Franco Castán. De modo que, esas palabras sólo son palabras, en los hechos, la 4T y sus gobernadores usan las fiscalías como látigo contra sus enemigos políticos.
