Sin embargo, durante la Marcha del domingo 27 de septiembre, que buscaba demostrar que el presidente de México la tenía más grande (la marcha), hubo constantes y sistemáticos abusos a los adultos mayores. Señala el periódico El Universal: «Doña Celia, una mujer de baja estatura y de 67 años de edad, quien padece diabetes e hipertensión. Ella fue convocada por una tallerista que imparte yoga en uno de los Pilares de la referida demarcación. Expuso que tenía hambre porque ‘por las prisas para llegar temprano y alcanzar un buen lugar en el camión’, no desayunó nada».
A ella le ofrecieron 2 mil pesos y lunch. Agrega El Universal: Ahí también estaba Matías, de 67 años y residente de la colonia Gertrudis Sánchez, a quien le prometieron tramitarle su tarjeta del Bienestar para que reciba el apoyo económico que otorga el gobierno federal. «No sabe la falta que me hace recibir ese dinerito que me ayudaría a comprar las medicinas que ya no me dan en el seguro. Quiero ver si en verdad me van a ayudar a tramitar la tarjeta, porque me han traído vuelta y vuelta».
