Jair Bolsonaro debería saber que, en este momento, en que se disputa la presidencia de Brasil con Lula da Silva, debería tener mucho más cuidado con lo que dice, hasta con lo que piensa, porque la lengua le puede jugar una mala pasada. Relataba Jair Bolsonaro en una entrevista con influencers, que él visitó en Venezuela una casa de citas donde trabajan menores venezolanas: Bolsonaro, tratando de hacer énfasis en la juventud de las chicas comentó: «Paré la moto en una esquina, me quité el casco, miré a unas chicas, tres o cuatro, bonitas, de 14, 15 años, arregladas, un sábado en una comunidad. Se generó un clima (ambiente), volví. ‘¿Puedo entrar en tu casa?’ Entré», relató Bolsonaro.
Vale mencionar que en Brasil la expresión “se generó un clima” significa que entre los sujetos que coquetean se genera atracción. Ese comentario fue suficiente para que en redes sociales se fueran sobre Bolsonaro, a quien calificaron de “pedófilo”, “asqueroso”. Una de las ayudantes de campaña de Lula incluso le dijo: «¿Usted quiere eso para su hija? (…) ¿Cómo llegó a ese punto?».
Aunque Jair Bolsonaro trató de defenderse mostrando su indignación, señalando que habían tergiversado sus palabras, el daño ya estaba hecho. En Brasil el hashtag #BolsonaroPedófilo se volvió viral. Vale señalar que las elecciones de segunda vuelta entre Lula y Bolsonaro están programadas para el 30 de octubre.
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