Lo grave del caso es que, al parecer, el presidente ignora que la Constitución Política prohíbe que la seguridad nacional y la organización, funcionamiento y disciplina de la fuerza armada permanente sea objeto de consulta popular. Además, la cereza del pastel es que el Ejecutivo federal dejaría al INE fuera de la organización de la misma, ya que pretende que ésta sea organizada por la Secretaría de Gobernación.
No por algo la vicecoordinadora de los senadores del PAN, Kenia López Rabadán, aseguró que la propuesta del presidente es ilegal e inconstitucional. López Rabadán dijo que si el presidente quisiera consultar realmente al pueblo de México, cumpliría con lo que mandata la ley suprema y dejaría que el Instituto Nacional Electoral (INE), en todo caso, se encargara de su organización.