Entre los grupos que se han identificado con el “ebradorismo” se encuentran Diálogos progresistas, Avanzada Nacional, Movimiento Progresista y Jóvenes por Marcelo. Desde luego su estructura también está compuesta por taxistas, charros, pescadores, mariachis y varias agrupaciones estudiantiles.
De modo que, hasta el momento, no hay nada seguro para nadie, aunque la jefa de Gobierno de la Ciudad de México asegure que ella será la illuminati que dirigirá el destino del país. Por lo pronto, Marcelo Ebrard enseña músculo y manda el mensaje de que aún no hay nada escrito ni seguro para nadie y de que moverá todo su peso político para alzarse con la candidatura presidencial de color guinda.