Omar García Harfuch, de acuerdo con su trayectoria profesional, fue delegado de la Policía Federal en Guerrero en los días que desaparecieron los 43 de Ayotzinapa. García Harfuch, quien desde hace tiempo ha sido señalado como uno de los hombres clave que participó en el encubrimiento de los responsables de la muerte de los estudiantes de la escuela normalista Isidro Burgos. La coartada de García Harfuch es que él no estuvo en Iguala el día que secuestraron a los jóvenes. En entrevista dada a un medio de comunicación el actual secretario de Seguridad Ciudadana declaró: «Es muy importante precisar que cuando suceden esos hechos (…) es muy importante en dónde estaba yo. Estaba en Buenavista Tomatlán, estaba en Nueva Italia».
Dice García Harfuch: «No estábamos solos, o con tres compañeros que pueden testificar, eran operativos muy grandes, de cientos de personas. Pueden corroborar el hotel en donde yo vivía en Nueva Italia, yo ya no estaba en Guerrero. Si hubiera estado, por supuesto que sales a asumir y eso no te hace responsable de ningún delito. Esas cosas no se pueden ocultar».
Tal vez diga la verdad el preferido de Claudia Sheinbaum, tal vez no estaba en Iguala, sin embargo, en las investigaciones de la FGR, en las reuniones en que se estaba elaborando la “verdad histórica”, ahí sí estuvo García Harfuch. En el documento de la Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia que Alejandro Encinas diera a conocer hace unos días, aparece García Harfuch en las investigaciones; él estuvo en el cónclave para elaborar esa “verdad histórica” que hoy tiene en la cárcel a Murillo Karam.
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