Delfina Gómez es una delincuente electoral. El Tribunal Electoral comprobó que mientras ella fue presidenta municipal de Texcoco su partido, Morena, retuvo durante tres años el 10% del sueldo a trabajadores públicos de Texcoco. Fue por ello que el Tribunal Electoral la multó con 4 millones de pesos. Por supuesto, cuando el presidente se enteró del caso, en lugar de correr de la Secretaría de Educación a esta delincuente, la arropó y le dijo como Peña Nieto a Rosario Robles, “no te preocupes Delfina”. Por qué habría de preocuparse si ese dinero se ocupó también para las campañas del mismo López Obrador.
Pues esta delincuente electoral, de acuerdo con la encuesta de Morena, será por enésima vez la candidata de Morena al gobierno del Estado de México. Otros candidatos que participaron fueron el senador Higinio Martínez, Horacio Duarte, titular de la Agencia Nacional de Aduanas y Fernando Vilchis, presidente municipal de Ecatepec.
Estos tres morenistas aceptaron los resultados de la encuesta, es decir, quedaron bien planchados con los puestos políticos que les ofrecieron. Esos son los candidatos de Morena, muy semejantes a Salgado Macedonio, puro delincuente honesto.
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