Al capturarlo, las personas se dieron que el animal, que sólo se quería unir a la fiesta de los turistas, era un varano del Nilo. Al parecer ese gran reptil de 120 centímetros de largo fue liberado en el lago Xochimilco por sus antiguos dueños.
Actualmente, este animal está siendo cuidado por unos veterinarios. Vale señalar que los varanos del Nilo son originarios de África y suelen vivir en lugares cercanos al agua, además que son reptiles que prefieren la soledad. Asimismo, y dentro del campo de la medicina naturista, se cree que la grasa de este reptil tiene propiedades curativas.